Esta recepción fue la ocasión de un intercambio entre Su Alteza Real y el Director General de la UNESCO, que se centró en la cooperación, desde hace diez años, entre la Fundación y la Organización de las Naciones Unidas en relación con la gestión del patrimonio de la ciudad de Rabat, inscrita en 2012 en la lista del patrimonio mundial de la humanidad. Rabat, con 348 hectáreas catalogadas, cuenta con ocho componentes históricos que hacen de la capital del Reino un patrimonio urbano simultáneamente antiguo y moderno.

La Fundación inicia y define una política ambiciosa en favor de la sensibilización de los habitantes de Rabat y de sus visitantes, ya que el patrimonio de una ciudad sólo se preserva de forma duradera cuando su población comprende su valor y se apega a él.

Su Alteza Real recibió, a continuación, a los miembros del Comité del Patrimonio Cultural Inmaterial en presencia de Mehdi Bensaid, ministro de Juventud, Cultura y Comunicación, y del embajador Samir Addahre, representante permanente del Reino de Marruecos ante la UNESCO.

Con esta ocasión, SAR la Princesa Lalla Hasnaa deseó pleno éxito a los trabajos del Comité.

En una declaración a la prensa, Azoulay se congratuló de la "riquísima" colaboración entre la Fundación y la UNESCO en el ámbito de la protección del patrimonio cultural en Rabat, y expresó su satisfacción por la intensidad de esta cooperación, que se desarrolla cada vez más, especialmente en los ámbitos de la educación y la sensibilización en las cuestiones relacionadas con el patrimonio.

La Fundación para la Salvaguarda del Patrimonio Cultural de Rabat participa en los trabajos de la 17ª sesión del Comité Intergubernamental para la Salvaguarda del Patrimonio Cultural Inmaterial organizando, junto con el Ministerio de Juventud, Cultura y Comunicación y la Maison de l'Artisan (Casa del Artesano), una exposición titulada: "La alfombra de Rabat, todo un arte", que se prolongará hasta el 3 de diciembre.

Esta distinguida alfombra, única de tradición urbana en Marruecos, se inspira en las tradiciones anatólica, persa y marroquí. Es un elemento de referencia del patrimonio inmaterial de la capital que tiene vocación de entrar en la lista del patrimonio mundial.

La Fundación para la Salvaguarda del Patrimonio Cultural de Rabat fue creada por Su Majestad el Rey Mohammed VI para preservar el patrimonio material, inmaterial y paisajístico de Rabat. De hecho, parte de la ciudad está incluida desde 2012 en la lista del patrimonio mundial de la humanidad de la UNESCO bajo el título: "Rabat, capital moderna y ciudad histórica: un patrimonio compartido".

La Fundación desarrolla programas en torno a tres áreas clave: educar, sensibilizar y federar. Como potente palanca de inclusión y cohesión, el patrimonio de Rabat es un verdadero motor de desarrollo social, económico y cultural.

Así, la Fundación lleva a cabo regularmente actividades de descubrimiento del patrimonio entre los habitantes de Rabat, sobre todo los más jóvenes, para crear este vínculo emocional, que garantiza el respeto y la conservación de su memoria.

Los programas de la Fundación se dirigen al público en general, a los profesionales, a las instituciones y especialmente a los más jóvenes.

En el marco de sus programas educativos, la Fundación crea kits educativos y plataformas digitalizadas de mediación del patrimonio cultural, a través del programa de "digitalización del patrimonio". También organiza talleres científicos a los que se invita a expertos de todos los continentes para compartir, intercambiar y hacer avanzar la valiosa causa de la conservación del patrimonio cultural moderno y antiguo.

El trabajo, realizado con un enfoque de asociación, combina conocimientos y recursos, y federa a los actores institucionales, públicos y privados con el objetivo de afirmar la necesidad de proteger el patrimonio en el Reino.