En una alocución con esta ocasión, el Sr. Nasser Bourita afirmó que la situación actual en el mundo árabe, caracterizada por su fragilidad y su complejidad, en un momento de proliferación de focos de tensión y crisis en un contexto internacional competitivo, no puede ser superada sin una visión común respaldada por una voluntad política firme y un compromiso efectivo en favor de los principios de respeto de la buena vecindad, la soberanía nacional y la integridad territorial de los Estados.

Al presidir el Consejo de la Liga de Estados Árabes a nivel de los ministros de Asuntos Exteriores, Sr. Bourita señaló que "el Reino de Marruecos, bajo la dirección de Su Majestad el Rey Mohammed VI, y partiendo la convicción del Reino de que el destino de la nación árabe depende de la coordinación de los esfuerzos de todos sus países, sigue convencido de que esta situación, cargada de riesgos, no puede superarse en ausencia de una visión común respaldada por una fuerte voluntad política y un compromiso efectivo en favor de los principios del respeto a la buena vecindad, la soberanía nacional y la integridad territorial de los Estados".

Se trata de una visión que pretende "impulsar verdaderas oportunidades de asociación y cooperación regionales y movilizar los recursos creativos de nuestros países para hacer frente a los retos de desarrollo comunes y globales", añadió.

Con este fin, el ministro destacó la visión de Su Majestad el Rey Mohammed VI para orientar la cooperación árabe común, que consiste en adoptar una "estrategia árabe solidaria" que responda a los retos a los que se enfrentan los países árabes y se base en una serie de prioridades, especialmente la creación de un entorno propicio para la resolución de los diferendos bilaterales, examinando el estado de avance de la acción árabe común e identificando los obstáculos, con el fin de avanzar desplegando mayores esfuerzos para crear un entorno propicio a la resolución de estos diferendos, y reforzar la confianza, sin la cual no se podrán alcanzar los objetivos deseados ni responder a las aspiraciones de los pueblos a la unidad, la armonía y la dignidad, afirmó.

El titular de Exteriores insistió asimismo en la necesidad de armonizar las cuestiones políticas y las apuestas del desarrollo, velando por que se siga prestando la debida atención a estas cuestiones políticas y que se afronten los grandes retos del desarrollo, especialmente en lo que se refiere a los proyectos de inversión y los intercambios de experiencias, considerados como los pilares de la seguridad nacional, la esencia misma de las preocupaciones de los países árabes, el principal indicador de la fiabilidad del trabajo común y el mejor medio de estar en sintonía con la globalización y la sociedad del saber y de la comunicación.

El ministro hizo un llamamiento a obrar por una complementariedad en el marco de agrupaciones regionales árabes armoniosas, adoptando un enfoque más solidario y complementario, tanto en el marco de estas agrupaciones integradas como de un bloque árabe sólido, capaz de responder a las aspiraciones vitales y reales de los pueblos hermanos, por progreso común y una integración razonable.

Subrayó la importancia de incorporar nuevos socios ampliando el espacio de cooperación árabe entre los gobiernos, mediante proyectos que reúnan a instancias políticas y representativas, las colectividades territoriales, la sociedad civil, los agentes económicos y sociales, así como las élites intelectuales, mediáticas y artísticas, además de aprovechar las oportunidades de asociación entre la Liga Árabe y otras agrupaciones regionales y grandes Estados, en un marco de respeto a las especificidades de los pueblos árabes y sus identidades nacionales.

También, se trata de obrar por consolidar la cooperación Sur-Sur sobre la base de la eficacia, el rendimiento y la credibilidad en sus dimensiones humana, de inversión y económica, sostuvo.

Bourita insistió también en la necesidad de modernizar las instancias y los mecanismos de la acción árabe común, al igual que las otras agrupaciones regionales que han hecho de la integración económica el preludio ideal para lograr la unidad y la complementariedad entre sus miembros.

La causa palestina seguirá ocupando el primer lugar entre las prioridades de la acción árabe común, aseguró Bourita, subrayando que se trata de un compromiso sincero adoptado por Marruecos, bajo la dirección de SM el Rey Mohammed VI, presidente del Comité Al-Quds, lejos de cualquier sobrepuja estéril.

Refiriéndose a la situación de algunos países árabes que siguen atravesando crisis políticas, guerras y conflictos, como Siria, Yemen y Sudán, Bourita subrayó que el Reino de Marruecos, bajo el liderazgo de Su Majestad el Rey, tiene grandes esperanzas de ver reinar la estabilidad en estos países, promoviendo el diálogo y las iniciativas pacíficas, lejos de la lógica de la fuerza y de las soluciones militares.